Digerir una verdad amarga
Casi todos sabemos que comer grandes cantidades de azúcar es malo para nuestra salud. Puede hacernos subir de peso, lo que a su vez puede causar problemas de salud como la diabetes tipo 2 y enfermedades del corazón. El problema es que la mayoría simplemente no conseguimos vencer nuestro amor por el dulce.
Las bebidas gaseosas son una gran parte de este problema, tanto que ha llevado al gobierno a tomar medidas e imponer un impuesto de azúcar. Un estudio reciente[1] ha sugerido que una reducción en el consumo de bebidas azucaradas durante los próximos 5 años podría resultar en 500 000 casos menos de personas con sobrepeso y un millón menos de casos de obesidad. Por supuesto, esto también tendría otros efectos increíbles, como una disminución en los casos de diabetes tipo 2 y otras enfermedades relacionadas con el peso.
Ahí va el subidón del azúcar
Parece un cambio increíblemente sencillo para mejorar nuestra salud. Así que, ¿por qué tantas personas deciden tomarse un refresco después del trabajo o para acompañar las comidas? La respuesta es que son adictos al “subidón” del azúcar. Y una vez que uno se sube a la montaña rusa del azúcar, es muy difícil bajarse de ella, independientemente de que ese “subidón” venga de refrescos o de carbohidratos almidonados.
¿Cuáles son los signos de la adicción al azúcar?
Signos físicos
Aunque puede ser difícil reconocer la adicción al azúcar en ti mismo/a, hay varias «banderas rojas» que pueden aparecer cuando estás consumiendo demasiado azúcar. Estas incluyen:
Romper el ciclo
Así que, aunque no reconozcamos los síntomas físicos de la adicción al azúcar, ¿qué hay del efecto que tiene sobre nuestro comportamiento? Estos son algunos de los síntomas del comportamiento más comunes que puedes presentar:
Síndrome de abstinencia
Si reconoces alguno de estos síntomas, no te preocupes. Puedes superarlos con bastante facilidad con un cambio de enfoque y un poco de fuerza de voluntad. Tan solo pasar una semana sin azúcar puede ser un importante primer paso para romper este hábito.
Por lo general, después de este período de tiempo los antojos de azúcar desaparecen, siempre y cuando no los alimentes. Esto se debe a que los niveles de azúcar en sangre se estabilizan y no tendrás los altibajos de insulina causados por ingerir muchos alimentos altos en carbohidratos.
No estés de bajón porque tu nuevo estilo de vida saludable vaya a ser aburrido... ¡no lo va a ser! Hay muchísimos alimentos riquísimos que puedes comer que son bajos en azúcar, y es fácil encontrar alternativas con un bajo contenido de azúcar/carbohidratos. Echa un vistazo a alguna de nuestras recetas favoritas, incluyendo este irresistible cheesecake de chocolate: http://uk-mealplanner.atkins.com/atkins-recipes/view-recipe.html?id=10932
[1] The Lancet Diabetes and Endocrinology Journal